La Psicología tiene su origen en 2 palabras griegas: psyche, "alma" y logos, "tratado" y busca estudiar y comprender el comportamiento, los procesos mentales y el alma de las persona. Siguiendo con nuestro razonamiento deductivo, la terapia psicológica es un proceso creativo y personal que se da entre el terapeuta y el paciente (o cliente) o los pacientes (en caso de terapia de pareja, familiar o grupal).
La terapia psicológica consiste en una serie de encuentros en los que a través de la palabra y diversas técnicas, la persona va superando sus dificultades y entendiendo mejor cómo se fueron formando estos problemas y qué puede hacer para afrontarlos. Es decir, la terapia posibilita que la persona se vaya conociendo mejor y desarrolle nuevas formas de resolver sus dificultades.
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